martes, 18 de mayo de 2010

Peter Piller tras sus sandalias

Una mujer muy elegante vino con su hijo adolecente a la galería. La mujer me preguntó con pose intelectual y altanera sobre el autor y la temática de la exposición, y yo le respondí con prontitud, la mujer me interpeló por mi concisa argumentación, y entonces agregué que la serie iba más allá que una muestra de fotografías, era un registro personal de Santiago, un trabajo inserto en un contexto más amplio de observación, iba tras un replanteamiento al ideario de imagen al que somos sometidos a diario, y de paso era una mirada crítica a la sobre exposición visual en que nos vemos envueltos, “pero estas fotos no dicen nada, están mal hechas, hasta desenfocadas están”, alegó el muchacho, “sí”, le respondí, “es un trabajo que ciertamente sale de la norma y rompe la lógica mediática”. Entonces el muchacho dio un paso hacia atrás con cara displicente, “¿lógica, qué es lógica para ti?”, inquirió, yo me lo quedé mirando, la madre me miró soberbia esperando también mi respuesta, recordé la historia en la que Gandhi se subió a un tren casi corriendo y perdió una de sus sandalias y los que lo acompañaban trataron de recuperarla pero fue inútil porque el tren ya había iniciado su marcha, entonces Gandhi para sorpresa de todos se sacó la sandalia que le quedaba y la arrojó a la línea férrea, los acompañantes lo miraron sorprendidos preguntándole el porqué de aquello, a lo que respondió “porque así el hombre que encuentre las sandalias tendrá un par que pueda usar”, recordé, pensé en decirlo pero no dije nada, y se fueron, y luego me senté, y me quedé pensando, no entró nadie a la galería por un largo rato, la tarde comenzaba a caer y los reflejos se colaban entre los ventanales, Michael Nyman estaba al piano, el eco de las teclas se escurría, las fotos hablaron por sí solas, y escribí esto.

9 comentarios:

Duquesa de Katmandu dijo...

Hizo bien en escribirlo.
Muy bueno.

beso,

...SiKoSiS... dijo...

Que genial, asi las palabras o los pensamientos no se los lleva el viento...y quedaron estos muy bien plasmados al menos. Muy gratas las imágenes de la derecha y también gracias por pasarte por mi blog.
Éxito!

Solo Marusa dijo...

gracias por las sandalias que haz dejado en mi espacio...

Mary Rogers dijo...

uff...me queda la sensación dando vueltas en la guata y admiro la forma en que reaccionaste. En teoría puedo ser sabia, en la práctica me habría costado no decir nada.
Me impresiona como el poder se toma las calles intentado pisotear la sensibilidad...
Bien por lo tuyo, bien por la coherencia.
abrazos

Macarena dijo...

Buena opcion dejar esas sandalias... la recogerá quien calze con la talla y logre entender que no todo en esta vida cabe en un cuadro limitado con enfoques y titulos malgastados.

hermosas fotos por lo demas... me agrado tu espacio.

campesina dijo...

Casi puedo ver la muestra, detrás de esa sensibilidad tiene que haber algo muy lindo.

Me dieron ganas de escuchar a Michael Nyman, así que lo busqué y me di tiempo, aquí también entraba el sol por la ventana..

cariños

carmen jiménez dijo...

Pues me asalta la duda si este relato de verdad te lo dictaron las fotografías desde su galería y con el eco de las teclas del piano escurriéndose (me encantó la expresión), pero de veras que me cautivó.
Un saludo primaveral.

Chelsea dijo...

Igual que Ghandi hizo bien en dejar la sandalia, creo que tú hiciste bien en escribir esto. Da en qué pensar ^^

Hace mucho que dejsate un comentario en mi blog (el primero y el último que tengo) y me gustaría que, si tienes un rato libre, volvieras a echar un vistazo por allí. Hay bastantes textos nuevos, pero no son gran cosa, así que no puedo prometer que vayan a interesarte. ^^'
Muchas gracias!

Anónimo dijo...

Aprendi mucho